Zapatero y Moratinos hablan de legalidad internacional
Conchi Moya
Zapatero y Moratinos hablan de legalidad internacional, de participación de la ONU, de derecho de autodeterminación de los saharauis... pero sin referendum.
Todos los grupos parlamentarios están en contra de la renuncia al Plan Baker, la gran mayoría del pueblo español siente que tiene una deuda pendiente con el pueblo (amigo) saharaui. En los periódicos se habla del Sahara, la agencia EFE muestra titulares equívocos, los solidarios en todo el mundo se mueven, los comentaristas políticos denuncian la injusticia que se intenta cometer. Otros callan o desinforman buscando un beneficio personal.
España va a vender por segunda vez a los saharauis, en el 75 una dictadura, en 2004 un gobierno recién estrenado que pone en la misma balanza a un régimen invasor y feudal y a un pueblo que va camino de ser exterminado. Jon Juaristi, defiende a los saharauis, ahora es muy fácil pero estuvo varios años al frente del Instituto Cervantes en los que pudo haber hecho algo. El gobierno canario hace negocios con el régimen invasor para "invertir" en un territorio invadido ilegalmente y pendiente de descolonización. Páginas web, guías turísicas, periodistas de deportes que hablan de "Sahara marroquí", "provincias del sur", mapas en los que aparece el Sahara Occidental dentro de Marruecos. EL SAHARA NO ES MARRUECOS. El Fuerte de Dajla (Villa Cisneros), símbolo de la ciudad para saharauis y españoles, es destruido por el invasor ante la pasividad del mundo entero, ¿dice algo la UNESCO sobre este tema?.
Baker dimite y la ONU elige al peor candidato posible, persona no aceptada por la parte saharaui, Alvaro de Soto, como enviado de Kofi Annan para el conflicto del Sahara. ¿Qué hace la MINURSO?. El Tribunal Supremo se apresura a dictar sentencia contra unos periodistas que informaron sobre la relación del monstruo Hassan II con el narcotráfico aunque en la sentencia se reconoce la veracidad de la información. El Comité Mundial de la Libertad de Prensa arremete por ello contra el Tribunal Supremo español.
¿Qué nos queda por hacer? Todavía mucho, sobre todo no tirar la toalla. Acciones de protesta, inundar de cartas a las diferentes instituciones: gobierno, Congreso, Ministerios, Parlamento Europeo. Escribir a los periódicos, manifestarnos, participar en todas las campañas que nos lleguen. Inventar iniciativas e implicar a los que nos rodean. Hablar claro y fuerte. Agitación positiva para que no pase lo que algunos quieren que acabe pasando. Los primeros en la lucha, los saharuis, detrás los solidarios. Somos muchos. Los intelectuales y artistas españoles se están moviendo. Hay que implicarles. También a los periodistas. Los intelectuales saharauis empiezan a alzar la voz. Ahora más que nunca no tiene que haber divisiones y tirar todos hacia el mismo lado. El momento es terriblemente delicado pero la sociedad civil tiene un papel determinante. Hagámoslo valer, independientemente del gobierno que esté en el poder. Sólo le falta al pueblo saharaui que se use su sufrimiento como arma electoral.
Conchi Moya,
periodista
Poemario por un Sahara Libre
20.07.04